Sentí por un momento que perdía el camino, tomar malas decisiones y dejarse llevar por el impulso no tiene buenos resultados y se atrae más caos.
No me quedo de otra mas que armarme de valor y continuar, si el miedo me golpeó, pero lo tuve que agarrar para impulsarme y no echarme para atrás. Después de tanto caminar, literalmente camine distancias como nunca, de un punto de la ciudad hasta el otro extremo, por fin recobre mi lugar.
Cada experiencia y cada momento te da conocimientos y madurez del alma; lo mejor del caso es que te lleva a conocerte a ti mismo, y sacar tu corazón de león!
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